Esperando la carroza

Mamá Cora, vive con uno de sus hijos, quien atraviesa una angustiante situación económica. La tensión financiera sumada a la falta de espacio y constantes conflictos con la anciana llevan a Susana, su esposa, a pedir al hermano Sergio que se la lleve a vivir con ellos por un tiempo.
Ante esto Mamá Cora decide apartarse por un día y es solicitada por una vecina para que cuide a su hijo. La desesperación llega a sus hijos al ver que la anciana se extravió. Todo se complica cuando los hijos, quienes no deseaban hacerse cargo de la anciana, confunden el cadáver de una mujer con el de su madre. Comenzará una ácida y negra comedia que enfrentará a las clases sociales, pero nadie sabe que la anciana supuestamente muerta observa todo desde el balcón del frente.