El jardín de Ordóñez

Ramiro Flores, excelente músico, se presenta con esta banda inusual, por su formación de quinteto con doble bateria. Abordan un repertorio de composiciones instrumentales originales con mucho groove, ideas precisas, y una imaginación frondosa.
El Jardín de Ordóñez tiene elementos de la música programática: siguen una idea previa extramusical, un programa literario. En este caso, hay un personaje, Ordóñez, cuyas vicisitudes son retratadas musicalmente por Flores. Esto no queda sólo en los títulos de las piezas, todas instrumentales, sino que también hay un texto en el arte de tapa de los discos, y videoclips rodados con actores y decorados para contar la historia.