Sábado de vino y gloria subió a escena por primera vez en noviembre de 1976, en la Sala Molière de la ciudad de Buenos Aires. En esa puesta, Alberto Drago también integró el elenco desempeñando el papel de Mario. Fue aquella una temporada que tuvo gran repercusión. Fueron más de 150 presentaciones a sala llena que además le valieron a la obra numerosas distinciones. Alberto Drago, seudónimo de Horacio Alberto Paracampo, fue desde muy joven un activo participante del movimiento teatral independiente. "Cuento lo que veo en el entorno en que estoy; creo que estoy obligado a relatar las cosas como son, -explicaba hace tiempo en una nota- porque estoy convencido de que a través del teatro de un país se puede conocer su historia. No creo que exista un teatro apolítico; para mí es decisivo estar comprometido con la realidad social, porque además pienso que la tarea del dramaturgo es una tarea de resistencia."
Sábado de vino y gloria, a través de estos personajes que conforman una familia podría decirse disfuncional, pone el acento en la hipocresía y la violencia de las relaciones, de los vínculos. Aborda de alguna manera el tema del autoritarismo, con mucho humor.
- Este espectáculo formó parte del evento: Teatro del país 2012
- TEATRO NACIONAL CERVANTES (2012)
- TEATRO ESPAÑOL (2012)